jueves, 25 de septiembre de 2008

Después de vuelva usted mañana...

Tal y como estab las cosas en la oficina del inem, decidí dejar pasar un tiempo prudencial para que los sufridos funcionarios volvieran de sus merecidas vacaciones. Así el día 18 volví al inem.

A las 9:30, porque no por mucho madrugar amanece más temprano, me presenté alli, en la oficina maldita. Mi turno? el 86.

Después de leerme en una mañana el libro "El niño con el pijama de rallas" apreté los dientes para que en la última media hora laboral del inem los números pasaran a prisa.

Y tuve la suerte de cara pues a las 2 menos cuarto mi número salió. Y en tan solo 5 minutos ya tenía todo solucionado, aunque ¿cómo no? con la pregunta ¿cómo no has venido antes? Para la que antes de contestar tuve que respirar profundamente y morderme la lengua.

Con todos los papeles solucionados volvía a ser una parada más, o mejor dicho una nueva integrante de la mayor empresa de Europa, el Inem.

Aprovechando que quedaban 10 minutos laborables me acerqué a preguntar por los cursos y ¡Oh vaya que casualidad! Me citan para un curso de técnico en diseño gráfico en Torrejón.

Genial, esto marcha.

lunes, 8 de septiembre de 2008

No soy una chica Inditex



Después de un verano "Vacaciones Santillana" decido volver al mundo laboral.
Tras un par de semanas de búsqueda creativa, me dejo llevar por mis impulsos primarios de ser un miembro útil de la comunidad, ganar dinero y salud mental y me inscribo en una de la múltiples ofertas que Inditex tiene en mi distrito. 

Para mi sorpresa me llaman para una entrevista, de la primera dinámica de grupo salgo victoriosa y de vuelta a casa me llaman para citarme en una próxima entrevista personal. Aunque resultó ser mi peor entrevista de trabajo me cogen.

Según me explican telefónicamente, me ha correspondido una jornada de 24 hrs. semanales (yo quería más) y empiezo cuando ellos me llamen tras el envío de un fax. 

Envío el fax el lunes por la mañana, me llaman, empiezo esa misma tarde. 
Aún sin firmar el contrato me acerco a la tienda que  me ha tocado y es... Uterqüe Serrano. Fenomenal, complementos a "precio de saldo" en la milla de oro de la capital. 

Al día siguiente una enorme sensación de vacío y regomello invade mi mente. Hago cálculos y descubro que si sigo en el paro gano 200 euros más que yendo a Uterqüe a trabajar. 

Les llamo, con la excusa de un curso irrechazable del Inem consigo que me hagan una carta de despido, al fin y al cabo aún estaba sin contrato y la tienda de destino (C.C. Plenilunio) aún no estaba inaugurada. 
Al día siguiente la voy a recoger y firmo el contrato. Me aseguran que es lo único que necesito y que por un día no tendré que volver a sacarme la tarjeta del inem. (nota: nunca te fíes de los departamentos laborales de las empresas, no tienen ni puta idea)

Voy al inem, contenta y feliz porque aunque tengo que esperar me acompaña un amigo que también tiene que pasar por "taquilla". 4 horas y 30 minutos después nos toca. Él, que era su segunda vez consigue salir victorioso del lance con la burocracia. A mi, me falta el certificado de empresa. 

Llamo a Inditex, consigo que me preparen el certificado de los cojones y que me lo envíen a la tienda más cercana. Me paso por la tienda, la encargada no tiene nada para mi. La encargada llama a la central, desde la central la ponen al día de lo que significa "certificado de empresa", se lo envían por fax, me lo sella y me voy. 

Al día siguiente, de nuevo al inem. Me paso a las 9:30, (abren a las 9) me toca el número 110. Me muero. Me fijo en las mesas y sólo hay 2 personas atendiendo. Te cagas. 

El fin de semana de por medio y vuelvo el lunes. Espero que haya más gente atendiendo, y aunque no me he levantado muy temprano me voy para allá. Son las 11:30, tengo el número 215. Me entra la risa. 

Continuará...