jueves, 8 de octubre de 2009

Moviendo Hilos


Desde la cola del Inem el mundo se ve en technicolor.
Sabes que hay muchas opciones y muchas oportunidades pero no puedes tomarlas o decidir nada hasta que no salgas de la incertidumbre que estar parado te provoca.

Por ejemplo, hay quien piensa que podríamos ir mirando un viaje o una escapada o la compra de algo, pero tú y yo que estamos parados nos vemos obligados a decir: -"Ya se verá, si de aquí a entonces tengo trabajo".

No poder hacer planes es algo que me desconcierta, sin embargo es necesario actuar como si nada de esto estuviera pasando e intentar salir de esta situación lo antes posible. Y es ahí donde interviene la corriente alterna y la corriente continua. Es decir, el enchufe.


Yo he sido una gran enchufada a lo largo de mi corta vida. Aunque preferiría llamarlo "recomendada" que suena mucho mejor.

Una vez me recomendaron en una agencia de azafatas y el resultado fue nefasto, así que hay que tener cuidado con las recomendaciones, no aceptes algo si no te llena o crees que no vas a poder cumplir al 100%.

Sé de otros casos donde entré por recomendación ajena y más tarde por recomendación propia, esos son los mejores. Una entrevista de trabajo donde eres capaz de venderte tan bien que tus entrevistadores han de contenerse para no llamarte a los 10 minutos de que hayas salido por la puerta. (Si te pasa esto alguna vez, cuéntamelo).

Ahora tal y como están las cosas, no puedes esperar a que te llamen del Inem para ofrecerte un trabajo ni tampoco esperar a encontrar curro a través de infojobs porque tu solicitud se perderá entre las otras 197 que se inscribieron en la misma oferta.

El mercado laboral está atomizado, colapsado. Como la A3 en pleno puente de mayo, tienes que buscar rutas alternativas (intenta no tener que pagar peaje) para conseguir un trabajo.


Resulta que en publicidad trabaja mucha gente, cada vez menos vale, pero trabajan muchos y resulta que un primo o un amigo o tu cuñado o el marido de tu suegra conoce a alguien que trabaja en una agencia. ¡¡¡Adelánte!!!! Envía tu curriculum, haz que navegue libre por las ondas internt-stelares poprque esto, como todo necesita ser visto para existir.

Así que empieza a tirar de agenda, de contactos, de redes sociales, familiares y amigos, todos aquellos que te debían un favor y aquellos a los que no te importará devolvérselo y hazles saber que estás en busca y captura. ¡Ánimo y buena suerte!