lunes, 9 de marzo de 2009

El trabajo mata a la creatividad

Y qué pasó tanto tiempo después, te preguntarás...

Han pasado varios meses desde mi último post, y sólo tengo una excusa para todo este tiempo: el trabajo. Desde mi etapa de parada salté estrepitosamente al mundo del pluriempleo. Así se gana una la vida en tiempos de crisis, para que luego la gente se queje de que no hay trabajo... Mentira y gorda!
El tiempo que estuve pluriempleada fue casi traumático, jornadas laborales de 12 horas con las navidades de por medio sin vacaciones completas y trabjando incluso festivos. El 100% de la recaudación se lo tragaron entre ese gordito de rojo y los queridos reyes majos...

Entrados en enero la situación comenzaba a ser insostenible, pasé a la jornada completa en la agencia de por las mañanas y cuando llegaba a casa me ponía con el otro trabajo ***ahora que lo he dejado ya os puedo contar con exactitud en qué consistía, próximamente ***

Después de pensarlo bastante lo dejé, y desde entonces malvivo con un único trabajo, y es aquí, tras lo que acabo de escribir, cuando me digo a mi misma lo que diría cualquiera: "un trabajo y da gracias que tienes trabajo, que hay mucha gente...." bla blabá, me importa un pimiento.

En enero se planifican las campañas anuales de algunos clientes y el resto del año para estos clientes se realizan adaptaciones, algunas, poquitas, de vez en cuando...
Pero este enero ha sido diferente, campañas anuales salpimentadas con infinidad de cambios diarios y nuevos clientes y nuevas creatividades, todo a la vez y todo para ayer.

Mi entrada de cabeza en el mundo de la publicidad. Con razón sobre mi mesa hay un identificador que reza: "Pilar, redactora en apuros", creado sabiamente por un compañero que a la que te descuidas “te cala”.

Por hoy ya he escrito suficiente, en futuros post haré un respasito de la agencia en la que estoy, el incremento infame del desempleo y cómo salir de las listas del INEN en el menor tiempo posible.

Salu2, Pilar.